Marzo de 2018
Aunque no era la primera vez que visitamos Albufeira, si era la primera que lo hacíamos con la caravana.
Portugal es un gran conocido de los gallegos, al menos para aquellos a los que nos gusta. Las escapadas a Portugal son algo típico desde aquí, queda al lado y al sur se llega en un día sin problemas.
Una de las veces que estuvimos anteriormente tenían carteles donde ponían que Albufeira tenía el mejor clima del mundo. No sé si es el mejor o no, pero desde luego tiene muy buen clima. Aquí estuvo una semana santa malísima y nosotros pudimos ir tres días a la playa, y cuando llovió lo hizo de noche y en algún momento pudieron caer cuatro gotas durante el día.
El trayecto desde aquí del centro-sur de Galicia se hace en de una tirada sin mucho problema, siempre y cuando estemos dispuestos a hacer una tirada de 700 km con paradas pequeñas para descansar.
Estuvimos en el Camping Albufeira, es un camping donde siempre hay gente, por lo que se ve, realmente hay extranjeros, bueno nosotros también lo somos, es que a veces me olvido de que Portugal es otro país. Como decía nos dio toda la sensación de que allí siempre había ingleses con asentamiento fijo. No tengo nada malo que decir del camping, las instalaciones buenas, la piscina estaba abierta (los niños se bañaron un día de solecito), los baños limpios y la atención buena. Sólo quizás destacar que se ve que tiene sus años y tuvo tiempos mejores, además estaba claro que la temporada no era la de más afluencia. El camping es inmenso, tiene instalaciones para hacer barbacoa (cada uno tiene que llevar su parrilla y carbón claro está), a nosotros nos toco una justo enfrente de la parcela, con lo cual comimos “churrasco” dos días, tiene parque para los niños con suelo arenoso, con lo cual ya sabéis como van a salir, y, como ya dije, piscinas. También dispone de cafetería/restaurante aunque el día que fuimos estaban celebrando algo, había como una fiesta, y no lo probamos. La situación del camping es espectacular para visitar tanto Albufeira como sus alrededores, eso si, hay que desplazarse.
Aunque nosotros fuimos un poco antes, solemos hacer coincidir siempre que se pueda las vacaciones durante el curso de los niños con las nuestras, a medida que se aproximaban los festivos de semana santa cada vez estábamos rodeados de más gallegos, se ve que todos fuimos a buscar el buen tiempo del sur.
Si nunca habéis estado en Albufeira lo primero que os va a alucinar son las playas. Esas playas son preciosidades de la naturaleza, una mezcla de acantilados y playa que hacen que sean una auténtica maravilla de la naturaleza, además del clima, claro está.
Por lo demás ha sido un viaje de ocio más que de turismo y no hay mucho más que contar a parte de que lo pasamos ¡¡¡Genial!!! y os recomendamos el destino a cualquiera.
